Y. M. de la Cavada: El deseo de repetir
Mi
supervivencia depende en gran medida del silencio y no sé absolutamente nada de
música moderna. Con excepción de los Beatles,
todos los grupos que menciona este libro son perfectos desconocidos para mí, incluido
David Bowie.
Se comprenderá
entonces que recelara de El deseo de
repetir, un texto con banda sonora.
Y sin embargo…
Y sin
embargo me gustó desde el primer instante. La dedicatoria, la nota biográfica,
la primera página. Algo en esas líneas emitía un alto grado de sinceridad. Como
si fueran las primeras notas de un trabajo bien hecho.
El deseo de repetir es la primera
novela del crítico musical Yahvé M. de la Cavada (1977). Más que una
generación, pienso que retrata cierta cara de un país y una época. Vidas que
pisan ya la madurez (nacieron en los setenta y ochenta) pero a las que no les queda
otro remedio que recortar aspiraciones y adaptarse a lo que hay: incertidumbre
y temporalidad, una precariedad absoluta tanto en el amor como en el trabajo.
Se las apaña
bien el autor para que los personajes reflejen este estado de estrechez y
decepción, con la música como sistema vinculante pero cada uno desde su soliloquio:
«El miedo te
vuelve permisivo, contigo mismo y con los demás».
«La ruptura preventiva
es la tendencia».
«Cuando no sabes
qué quieres, todo tiene un valor difuso».
«No sé
seguir de ninguna otra forma que no sea seguir, sin más».
«El mayor
problema (en este país) no es que nos
mintieran, sino que todos nos lo creímos a pies juntillas».
«Yo no
consigo empaparme de su constante discurso de todo va a ir bien, ya lo verás. A
mí de momento no me va tan bien».
«Un corazón
roto solo se arregla cuando se arregla. Nunca antes. Y, desde luego, no depende
de ti».
«en general,
este país es una mierda en lo musical».
«solo podía
pensar en que no sabía qué quería hacer, qué podía hacer, ni qué iba a hacer».
Como parte
del juego narrativo, uno solo de los personajes rompe el formato introspectivo
y “habla” fugazmente en algunas páginas. Percatarme de ello me llevó lo suyo, aunque el
autor tiene sus razones. Qué sentido tiene el epílogo del gato sería otra
pregunta que yo haría al escritor.
Termino este
texto en el bosque, a una hora en que no hay nadie, ni siquiera paseantes de
perros. Atrapo los últimos rayos de sol y me digo que este libro, en general,
es bueno. No hay pose ni vacías pretensiones. No hay una
sola errata. Nada se deja al azar. Me digo que la literatura también es esto: el deseo de contar, de reproducir
la vida sobre papel, conseguir que suene más allá de este ahora caduco e implacable del que tan poco sabemos.
Y por
fin, el silencio.
Hermoso silencio.
Hermoso silencio.
El deseo de repetir (Aloha Editorial, 2018),
de Yahvé M. de la Cavada | 179 páginas
| 14,25 euros.
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