J. Ayesta: Helena o el mar del verano

Julián Ayesta: Helena o el mar del verano. Acantilado. Sobran los paraísos de ficción si se puede evocar de esta manera, con la luz hecha letra. Leer, respirar. Su lirismo y brevedad narcotizan. Todas las vísceras se ensanchan a la vez. El amor. La naturaleza. Aquellos muchachos. La piel de los veranos inmensos. Helena o el mar del verano (1952) fue la única novela publicada por el gijonés Julián Ayesta (1919-1996). Cien escasas páginas de estructura cíclica (‘En verano’, ‘En invierno’, ‘En verano otra vez’) que sobreviven a la historia y a la crítica de un país no siempre clemente con sus creadores. «Yo me acerqué a la cama de Helena. Olía tibiamente como los nidos con crías. Helena dormía con la cara en la almohada y su largo pelo rubio recogido sobre la espalda. Respiraba muy despacio, tan suave que me remordía la conciencia arrancarle las sábanas para empezar la batalla». El relato es sencillo, el lenguaje también. En primera persona, asistimos al romper de la p...