Entradas

Mostrando las entradas etiquetadas como literatura

F. J. Irazoki: Ciento noventa espejos

Imagen
Francisco Javier Irazoki: Ciento noventa espejos . Hiperión. Noventa y cinco textos de ciento noventa palabras cada uno + un prólogo de idéntica extensión = Ciento noventa y dos páginas de tránsito poético. De tránsito poético sujeto a lo real. Espacio de sobra para hablar de música, cine, pintura, fotografía, cafés, ciudades. Del habitar extranjero . De ideas e ideologías. De ética y amigos. De literatura por encima de todo. «El escritor es un fabricante de sillas verbales», comenta Irazoki. El autor agradece al azar «haber nacido en una familia humilde» y cada texto es prueba de ese quehacer modesto y artesano. La palabra se ajusta y se pule, no se engrandece. Francisco Javier, nombre compuesto, me lleva a Miguel Ángel y al misterio de la belleza oculta en la armonía de las partes. La armonía que aquí alumbra un todo audible, visible, palpable casi. A la vida nos adherimos con una fuerza inquebrantable, gravitatoria, con un apego en forma de ley física. Ira...

C. Camacho: Vuelo doméstico

Imagen
Carmen Camacho:  Vuelo doméstico . El Gaviero Ediciones. Cuarto Menor. Ilustración de Cristina Llorente. «Y sin ser hombre de letras, ni siquiera de palabras, con él aprendimos  que los cuentos hay que contarlos en su brujo momento». (‘Old Windy’s stories’, Vuelo doméstico) Aunque fuera arrecie el frío, cuando el arte embiste, una tiembla de calor. Carmen Camacho. Original espécimen poético. Pasmada me quedo ante su ensalivado, su redoble de palillos, su astucia, su sapiencia. Yegua lorquiana. Plumaje flamenco sobre una pata tiesa. Chiste. Chispa. Salero. Solera. Exhibicionismo, el justo. Sin prepotencias. Copla de barrio, de calle, de pueblo y de ciudad. Vista de lince. Oído de murciélago. Vuelo doméstico : pura sangre en técnica mixta. Brebaje gazpachero digno del (ex)templo Adrià. Versos-relato, cuentos-verso. Columpio de efemérides, imágenes, músicas, notas de prensa. Alta alcurnia literaria. Rapsodia de lentejas. Antes de devolverlo al estant...

A. Kristof: La analfabeta

Imagen
Agota Kristof: La analfabeta. Ediciones Obelisco. Traducción de Juli Peradejordi. Once recortes vitales, once textos. Agota Kristof (1935-2011) nació en Hungría, emigró a Suiza y escribió en francés. Fue autora, entre otras obras, de las novelas   Claus y Lucas   ( El gran cuaderno, La prueba, La tercera mentira ) y   Ayer , del volumen de cuentos No importa y de multitud de obras de teatro . (EXTRACTOS Y MICROCAVILACIONES) E1. «Así es como, a la edad de veintiún años, me enfrento a una lengua desconocida para mí. Empieza mi lucha para conquistar esa lengua, una lucha larga y encarnizada que durará toda mi vida. Por eso digo que la lengua francesa es una lengua enemiga. Pero hay otra razón, y es la más grave: esta lengua está matando a mi lengua materna». (En ‘Lengua materna y lenguas enemigas’). MC1: Hablar una lengua extranjera es caminar de puntillas: avanzar lento, cansarte rápido, por todas partes terreno escarpado, constantes peligros. También...

M. Sanz: No tan incendiario

Imagen
Marta Sanz: No tan incendiario . Periférica. Colección «Pequeños tratados». «Aquí no hay vocación de transparencia. Ni de limpieza. Ni de claridad. Este texto aspira a manchar de tinta las manos que lo agarren». Todos mis libros los compro en papel. Al inicio de No tan incendiario se me escapa un THIS IS GREAT , y mi lápiz no deja de moverse hasta el final del ensayo. Notas, subrayados, asteriscos, exclamaciones, corchetes. La obra queda hecha una EME. No miro el móvil, no abro el ordenador, aguanto las ganas de ir al lavabo. Me acuesto con los ojos rojos y pocas horas de sueño por delante. Leer vampiriza y roba la salud. Así estamos. No tan incendiario salpica, ensucia, echa la bronca. Se manifiesta… 1. Contra la pasividad y la inacción. Contra la cultura como relleno del ocio. 2. Contra los escritores faltos de realidades y demasiada literatura a sus hombros. 3. Contra «la estética de la ternura» y de la cursilería. 4. Contra el espanto de necesitar...

M.A. Clark Bremer: El librero de París y la princesa rusa

Imagen
Mary Ann Clark Bremer:  El librero de París y la princesa rusa . Periférica. Traducción de Hugo Bachelli. Dedico una segunda microcrítica a esta autora , la dama de pulcra elegancia. Sus dos primeros libros ( Una biblioteca de verano y Cuando acabe el invierno ) fueron descubrimientos fortuitos. Este, por el contrario, ha sido intencionado. Años 60, París. Un librero y una noble rusa. La guerra y sus trágicas pérdidas. Jean-François de Bastide como murmullo de fondo. Clark Bremer es testigo y cronista de un amor interrumpido por una inexplicable desaparición. Anécdotas mínimas incrustadas en libros y lecturas. Recuerdos engarzados en un collar de perlas. Frases transparentes. Comas de nailon.  Literatura sin trampas, libre de pedantería.   La oscilación del pecho se detiene: sí, el placer perturba.  Nácar. Suavidad proustiana. Cofre forrado del mejor terciopelo.  Piedras que huelen a sándalo y especias.  Belleza que no hace falta des...

R. J. Sender: La tesis de Nancy

Imagen
Ramón J. Sender:  La tesis de Nancy . Casals. Edición de Francisco Troya y Pilar Úcar. Leer La tesis de Nancy es visitar a un vecino con quien se había coincidido únicamente en el ascensor. El promotor de la cita fue Gonzalo Fernández , traductor y amigo en cuyo criterio confío. Que si recuperar el uso en desuso de nuestra lengua. Que si la literatura. Que si una tertulia en español. Dónde encontrar gente: el gran problema. Mi vida a lo leche condensada (trabajo, hijos, libros) y mi recelo de los grupos no son de gran ayuda. Y sin embargo, logramos reunirnos: cuatro traductores, una historiadora, un doctor en matemáticas y la que teclea. Triturando a siete bandas literatura en español. Perteneciente a una familia «de honda raigambre aragonesa», Ramón J. Sender (1901) fue un «escritor a contrapelo», fecundo y ácrata como pocos. En 1939 se exilió a México y luego a Estados Unidos. Trabajó en las universidades de Alburquerque y de Los Ángeles. Desde EE UU, donde...

N. Krauss: La historia del amor

Imagen
Nicole Krauss: La historia del amor . Salamandra. Traducción de Ana María de la Fuente. «Cuando escriban mi necrológica. Mañana. O pasado. Pondrán: “Leo Gursky ha muerto. Deja un apartamento lleno de mierda”». Son las primeras líneas de La historia del amor , publicada en 2006, un annus horribilis  en el que leí un único libro. Encerrada. En un coche. En un camping. En Francia. Dónde en Francia: no sé. Lo que sí sé: aquel libro no fue La historia del amor. Más adelante, el protagonista imagina otro epitafio: «Leo Gursky: buscaba una explicación». Esta novela va de eso: búsquedas, encuentros, literatura, descubrimientos. Historias dentro de más historias. Piezas traspasadas por comicidad y tragedias que se deslizan como placas tectónicas, en una estructura que demanda leer con atención. Tal vez no haya más acertada forma de retratar el amor, ese ¿hecho? ¿materia? ¿concepto? fragmentario, más denso que el iridio y tan inaprensible como... una sandía en invierno. ...

L. Foschini: El abrigo de Proust

Imagen
Lorenza Foschini: El abrigo de Proust. Impedimenta, 2013. Traducción y postfacio de Hugo Beccacece. El frío es una dolencia incurable que empeora con el tiempo. Proust, donante de esperma de la literatura moderna y friolero congénito, se cobijaba bajo un abrigo oscuro forrado de piel de nutria. Temblaba a todas horas y convirtió esta prenda en su segundo pellejo allá donde estuviera.   Lorenza Foschini (periodista, escritora y traductora italiana) recoge por azar la pista de un tal Jacques Guérin, famoso perfumista poseído por un gran amor a la literatura y un afán coleccionista desbocado. Él y sus pesquisas para atrapar el abrigo de Proust son los protagonistas de una inusitada intriga literaria.   Resulta maravilloso revivir a Proust a través de sus objetos. Saber, por ejemplo, que sus plastrones de seda eran de un rosa cremoso perseguido por el autor durante mucho tiempo. ¿No contiene esta obra la herencia proustiana...

M. Á. Hernández-Navarro: Cuaderno [...] duelo

Imagen
Miguel Á. Hernández-Navarro: Cuaderno […] duelo . Nausícaä. Colección La rosa profunda . Miguel Á. Hernández-Navarro, o Miguel Ángel Hernández , se encaramó al podio del reconocimiento literario con Intento de escapada (Anagrama, 2013) pero ya contaba con varias obras en su haber. Cuaderno […] duelo es una de ellas: cuatro textos en torno a la pérdida (de la madre, de la memoria, del padre, del origen) unidos por el anhelo de formular el dolor. «El duelo es una batalla entre el sentir y las palabras», afirma. «Las huestes del lenguaje siempre serán mermadas por el terrorismo de la experiencia». Hernández escribe en frases cortas, a estocadas y golpes lentos de daga, secretando dudas y fantasmas. Para asegurarse el buen paso utiliza la primera, la tercera y la segunda persona, un recurso que desde mi punto de vista ayuda eficazmente a atrapar el espesor inabarcable del dolor. Cada texto parece tener su conclusión. La literatura es inseparable de la vida. Escribimos ...

V. Woolf: Leer o no leer

Imagen
Virginia Woolf: Leer o no leer y otros escritos . Abada editores. Traducción de Miguel Á. Martínez-Cabeza. Edición de Mª del Carmen Espínola Rosillo.   Woolf «fue una gran ensayista porque fue una gran lectora», y llegó a la narrativa tras ejercer la crítica literaria durante mucho tiempo. Leer o no leer se compone de dieciséis ensayos en torno a la lectura, la crítica, los géneros literarios, las técnicas de escritura, la educación de los jóvenes o la influencia del físico de un escritor sobre la percepción de su obra. La voz de Woolf suena experta, serena, burlona, con pleno dominio de su materia de estudio. Perseguía comunicar con eficacia, escribir honestamente y sin torpezas. Sus ensayos son una lección de escritura, textos libres de cháchara en los que funde experiencia, conocimiento y talento. Propone acercarse a la vida y descartar la mayoría de las convenciones. Registrar el patrón «con que cada imagen o incidente se graba en la conciencia». ...

M. Duras: Escribir

Imagen
Marguerite Duras: Escribir. Tusquets Editores, Fábula. Traducción de Ana Mª Moix. Solía leer a Duras en periodos de exámenes.  Aquella biblioteca con volúmenes al alcance de la mano invitaba a la lectura. Era fácil hallar mesa y devorarlos in situ, sin mediar préstamo alguno.  Sus obras, consumidas como sándwiches durante las pausas de estudio, me aportaban bastante más que los apuntes universitarios. Duras. Portentosa madame de lo escueto que esparce su prosa a dentelladas. Hermana en nombre y casta de otra gran Marguerite, Yourcenar. Un escritor «es algo extraño, una contradicción, un sinsentido». Cuando se extrae todo de uno mismo  — todo un libro — , se vive una soledad que no se comparte con nadie, una locura que a veces no se ve, sólo se presiente. Escribir es un «delirio personal» que casi nada detiene. Duras rechaza las obras sin «poso alguno, sin auténtico autor, sin noche». La verdadera escritura se incrusta en el pensamiento y ...

P. Roth: Lecturas de mí mismo

Imagen
Philip Roth:  Lecturas de mí mismo. Debolsillo. Traducción de Jordi Fibla. Roth se lee a sí mismo. Se evalúa. Se compromete. Se destapa.  Piensa, escribe, habla y el resultado lo estructura en dos partes: 1) entrevistas concedidas en torno a la creación literaria y a su obra y 2) artículos y ensayos donde vuelca preocupaciones y entusiasmos. Sus textos reflejan «un interés constante por la relación entre el mundo escrito y el no escrito», distinción que toma de Paul Goodman. Cavila además sin ocultar ciertas dudas: «Separada de la ficción, con frecuencia la sabiduría de un novelista no es más que cháchara». Según Roth, para ver, para escribir, un escritor necesita producir sus venenos, volverse loco. La escritura resulta ser el grito o el antídoto que a veces —no siempre­— toma forma de libro. Sus ideas se abren paso como cuñas: «la vida no tiene necesariamente un rumbo, una sencilla secuencia»; la ficción nos libera de las restriccion...